Cuando el espacio lo permite, tener un cuarto de juegos para niños en el hogar sería lo ideal. En ese espacio decorado especialmente y con muebles infantiles, los niños de la familia tendrían un territorio único y propio en donde podrían divertirse libremente. Ahora bien, un cuarto de juegos para niños no es lo mismo que las habitaciones infantiles, no es un cuarto común. Para que realmente cumpla con su función, usted debe tener en cuenta detalles importantes para darle a su hijo o a sus hijos el cuarto de juegos ideal.
Lo primero y más claro, es que los padres deben considerar los gustos personales de sus pequeños así como tener en cuenta su sexo para hacer diferentes elecciones. También es muy importante tener en cuenta si el niño o los niños son hiperactivos o no. De acuerdo a esta información es que podrá comenzar a elegir los colores predominantes de la habitación y eso es algo muy importante porque de acuerdo a la personalidad de los niños, habrá algunos que los aburran y otros que los estimulen. Haga una elección adecuada.
De más está decir que el cuarto de juegos debe ser espacioso y luminoso y una muy buena idea para que los pequeños lo disfruten al máximo es que sean irregulares: se pueden crear desniveles. ¿Qué finalidad tiene esto? Brindarles a los niños un espacio en donde puedan echar a volar su imaginación y su creatividad y puedan disfrutar de varios ambientes.
Los muebles infantiles que se utilicen deberán ser lo más funcionales posibles porque de esa manera se garantiza no contar con un exceso de mobiliario en la habitación que quite espacio para el juego de los niños. No sería una buena idea incorporar en la habitación muebles que no han sido especialmente diseñados para niños: un mueble infantil cumple con todos los requisitos de seguridad necesarios para que los pequeños no se lastimen. Un buen complemento para el cuarto de juegos es el revestimiento de las paredes con materiales como el corcho. Así usted estará protegiendo a las paredes de los daños y a sus hijos de posibles golpes. No olvide que no se trata de una sala de relax sino todo lo contario.
Como se dijo anteriormente, este espacio no tiene que ver con los dormitorios infantiles por lo tanto hay ciertos aspectos que se le podrían escapar. Por ejemplo el suelo. Generalmente a los niños les gusta mucho jugar en éste. Si usted coloca en el suelo una buena alfombra no solamente los abrigará durante el invierno, sino que para usted será mucho más fácil lograr la limpieza del cuarto de juegos.
El cuarto de juegos tiene que incluir una mesa y al menos una silla. Su pequeño tiene que tener comodidad para poder realizar manualidades y esos dibujos que tanto disfruta colorear. La seguridad es muy importante pero así también lo es la diversión del niño. Para que esto se garantice usted tendrá siempre en cuenta que el cuarto ha de estar amueblado y decorado de la mejor manera posible y que no falten los juegos preferidos del niño. Y si tiene un niño muy pequeño coloque una cuna en el cuarto, así podrá dormir su siesta siempre que lo necesite.
Quizás su casa o piso no cuenta con el suficiente espacio para que su hijo tenga su propia sala de juegos y usted esté pensando que es una pena que eso ocurra. Lo bueno es que en toda habitación siempre se puede disponer de una pequeña área de juegos. Sí, en el propio dormitorio infantil de su hijo, en un rincón de este. Inténtelo. No se arrepentirá y su hijo lo disfrutará muchísimo.