Por una presencia consciente en Internet

Que el PIB español ha aumentado de forma directa en el año 2009 en 23.400 millones de euros gracias a Internet, es un dato importante y real publicado ya en diversos medios. A partir de aquí las previsiones apuntan a que en 2015 esta cifra podría alcanzar los 63.000 millones de euros, lo que nos da una idea del papel todavía más destacado que desempeñarán las nuevas tecnologías en la economía española.

Para que esto ocurra, sin embargo, es necesario tener en cuenta no sólo las condiciones actuales en las que las tecnologías conviven y se desarrollan, sino las condiciones necesarias para que continúen ocupando un lugar destacado en los distintos sectores de actividad y con él, favoreciendo su desarrollo y contribuyendo a la mejora de la gestión de los negocios que componen el tejido empresarial español.

Conviene destacar que entre los impactos de Internet sobre la economía, uno de ellos es el correspondiente al consumo privado previa búsqueda online de la información sobre el producto que se va a consumir y que posteriormente acaba adquiriéndose y consumiéndose. Es decir, el consumo que se hace de un producto o servicio en un establecimiento físico, pero que previamente ha sido buscado en la Red.

Este tipo de actividad, cuyo volumen de negocio asciende a 38.000 millones de euros es, según datos facilitados por Google, la forma de venta con la que se identifican el 70% de los usuarios que buscan productos a través de Internet. Es cierto que no se trata de una forma directa de e-commerce, pero que sin lugar a dudas favorece enormemente las ventas offline y que pone de manifiesto la importancia de contar con un web o una plataforma digital que no sólo represente fielmente a nuestro negocio, sino que además permita un intercambio de información ágil entre clientes potenciales y trabajadores, entre agentes externos e internos.

Parte del proceso de adaptar la infraestructura tecnológica de un negocio a los nuevos tiempos con el fin último de ofrecer un mejor servicio y por lo tanto, obtener más beneficios, pasa por ser consciente de que se trata de introducir cambios constantes. No es un cambio puntual que se realice una vez en la vida. De aquí la necesidad de contar con sistemas y aplicaciones ágiles y flexibles que ayuden precisamente, a esta adaptación constante.

En este sentido el Business Process Managenmet (BPM), ha sido creado con el fin de proveer a las organizaciones de la agilidad y flexibilidad necesaria para responder a tiempo y deprisa a los nuevos cambios y oportunidades del mercado.

Empresas como Dacartec conocen bien esta metodología orientada a la administración de los procesos de negocio. Su propia nomenclatura: Gestión de Procesos de Negocio, lleva implícita su función de mejora de la eficiencia y con ella, la mejora de la administración. El paso ineludible para conseguir lo expuesto en el párrafo anterior: poder responder a tiempo a los nuevos cambios y oportunidades del mercado.

Destacados

  • Contar con sistemas y aplicaciones ágiles y flexibles es fundamental para poder responder a tiempo a los permanentes cambios del mercado.
  • Empresas como Dacartec conocen bien la metodología orientada a la administración de los procesos de negocio: el BPM, un medio para obtener la agilidad y flexibilidad que demanda cualquier proceso de adaptación.

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