Desde la tecnificación de los métodos para obtener energía procedente de la fuerza del agua y el viento, los molinos de vientos son una figura representativa de estos esfuerzos, especialmente para la molienda y la elaboración de la harina. La sofisticación y avances en la técnica han permitido que estos molinos progresen aplicando a sus diversos componentes las técnicas en materiales más resistentes, la última tecnología y sistemas electrónicos para su funcionamiento. En este contexto, las torres eólicas son la evolución de estos aparatos que hoy en día se perfilan como una alternativa sólida ante la búsqueda de fuentes de energía que no contaminen el medio ambiente.
Las torres eólicas funcionan como un generador eléctrico que se mueve gracias a una turbina eólica o de viento. En otras palabras, estos aparatos funcionan por la energía cinética del aire que está en movimiento, produciendo energía mecánica al rotor en hélice que gira y cuya potencia da lugar a la energía eléctrica. Esto es debido a un trabajo sincronizado a fin que la frecuencia de la corriente generada se mantenga con la de la red.
Existen distintos tipos de torres eólicas, clasificadas según el eje de rotación de las aspas (horizontal, vertical, etc.), potencia, tipo de generador, fabricante de las turbinas, entre otros. Generalmente, éstas funcionan en grupos situados en los llamados parques eólicos y plantas de generación eléctrica, aunque distantes para reducir el impacto ambiental y al mismo tiempo las turbulencias que se puedan crear por el movimiento del rotor. De la misma forma, las torres pueden trabajar de forma aislada para provisionar en parte o en totalidad a ciertos puntos.
En Europa, este tipo de generadores eólicos son bastante populares en zonas rurales aisladas, particularmente en Alemania, Países Bajos, Dinamarca y España. En el caso d este último, las torres eólicas forman grupos de gran tamaño en las zonas montañosas alejados de las urbes. La expansión que se está produciendo en esta región en el uso de la energía eólica se debe a la viabilidad en las actividades industriales, por lo que la demanda ha ido creciendo más.
Aun así, cabe mencionar que la energía eólica está en proceso de desarrollo y su evolución depende del aumento en la necesidad de garantizar diferentes fuentes para el suministro de energía, diferentes a los combustibles fósiles en zonas especializadas con el objetivo de garantizar la sostenibilidad de los recursos naturales.