Con el creciente número de escándalos que ocurren, las empresas están tratando de establecer la confianza con sus accionistas y clientes a través de la responsabilidad social corporativa. En la historia de la responsabilidad social corporativa, ha habido muchos modelos desarrollados en un intento de clasificar las respuestas corporativas a los problemas sociales.
En las primeras etapas se argumentó que el objetivo principal de una empresa debe ganar legitimidad en la sociedad a través de diferentes enfoques estratégicos. Este modelo tiene tres formas en que una empresa responde a las cuestiones sociales. El primero es la obligación social, en el que las empresas sólo responden a los requisitos legales. Esto está por debajo de los estándares de la sociedad.
El segundo nivel es la responsabilidad social que se refiere a la empresa que actúa en las normas de la sociedad. El último nivel es la sensibilidad social que es la empresa superior a las normas de la sociedad. El siguiente paso en la responsabilidad social corporativa es un esquema de tres dimensiones para el desempeño corporativo.
La primera dimensión de las empresas ofertas de responsabilidad social con la motivación de actividades socialmente responsables, principalmente las actividades económicas, jurídicas, éticas y discrecionales. La segunda dimensión de ofertas con las preocupaciones de las sociedades, al igual que los temas ambientales y de seguridad del producto.
La tercera y última dimensión tiene que ver con el rango de los diferentes niveles de respuesta, al pasar de no hacer nada, a ir más allá de las expectativas de todos. Estos dos modelos muestran el grado en que se ha comprometido a una empresa ser socialmente responsable.
Las empresas están empezando a notar los beneficios de la responsabilidad social corporativa. Una encuesta interactiva mostró que el 79 por ciento de los estadounidenses toman la ciudadanía corporativa a la hora de decidir si comprar productos de una empresa en particular. “Esto demuestra lo importante que es para las empresas a preocuparse por cómo ve la sociedad de su empresa.
Si la sociedad se entera de un escándalo dentro de la empresa, van a perder confianza en la compañía y podría comprar un producto de los competidores. Sin embargo, si se mantienen los altos estándares que ganará la lealtad con sus clientes.
Un gran porcentaje de ejecutivos de la compañía creen que el desarrollo de un plan de responsabilidad social corporativa dará lugar a un aumento de los beneficios empresariales, pero es un tema muy debatido si realmente hay una relación entre la responsabilidad social corporativa y el desempeño financiero de una empresa.
Una empresa socialmente responsable puede tener acceso al capital adicional a través de la inversión de capital. Muchos inversores pueden darse cuenta si una empresa es socialmente responsable y son más propensos a invertir en una empresa socialmente responsable.
La inversión socialmente responsable es una de las áreas más dinámicas y de rápido crecimiento en el mundo financiero.
Al mantener un ojo en las tendencias dentro de la sociedad, se puede construir la confianza y lealtad necesarias para garantizar un futuro sostenible brillante.