Básicamente, la reunificación de deudas es una refinanciación y consiste en agrupar todos los créditos (personales, hipotecas o tarjetas) en un nuevo préstamo hipotecario a un plazo más largo, de manera que se reduce la cuota mensual a pagar. La reunificación de deudas aparece como una solución para quienes tienen múltiples préstamos y créditos, al ofrecer una reducción de la cuota mensual de hasta el 50%, pero el endeudamiento final aumenta debido a los numerosos gastos y comisiones que genera la operación.
Requisitos
Para que una entidad bancaria apruebe una reunificación de deudas deben cumplirse varias condiciones:
- El cliente debe tener una vivienda, con o sin cargas, que se utilizará como garantía del nuevo préstamo hipotecario.
- El capital total de la nueva hipoteca no puede superar el 80% del valor de tasación del piso (la entidad financiera solicitará una tasación actualizada).
- La cuota mensual del nuevo crédito hipotecario no debe superar el 35% de los ingresos netos mensuales de la unidad familiar.
Tramitación
Para gestionar una reunificación de deudas tenemos dos opciones:
- A través de una entidad de reunificación de deudas: estas empresas realizan todas las gestiones en nombre del interesado, negocian con distintas entidades financieras y proponen la operacion, que generalmente consistirá en cancelar todos los créditos y contratar un nuevo hipotecario por mayor capital y plazo, cuyo importe cubra el capital pendiente más las comisiones y gastos que la reunificación de deudas supone. El intermediario cobrará por su intermediación una comisión de entre el 3% y 7% del importe a refinanciar. Estas empresas, al igual que las de créditos rápidos, dan servicio a los clientes más apurados, a cambio de altas comisiones.
- Directamente con las entidades financieras: en casos no muy graves, el consumidor puede gestionar él mismo la reunificación de deudas negociando con su banco o con otras entidades financieras, pudiendo de esta manera ahorrarse la comisión del intermediario.
Ventajas
Veamos las principales ventajas de la reunificación de deudas:
- Tras una reunificación de deudas la cuota mensual a pagar es menor.
- La reunificación de deudas permite acceder a las mejores ofertas del mercado, sin limitarse a un único banco.
- Reduce el tipo de interés efectivo.
- Se puede acceder a la reunificación de deudas aunque se figure en listas de morosidad.
- Rapidez.
- Confidencialidad.
Inconvenientes
La reunificación de deudas tiene numerosos inconvenientes:
- Aumenta el plazo de amortización, por lo que se pagará durante más tiempo.
- Genera numerosos gastos y comisiones (cancelación de los préstamos iniciales, formalización del nuevo hipotecario, comisión del intermediario) por lo que las deudas se incrementan.
- Las entidades de reunificación de deudas no son bancos ni financieras, por lo que no están sujetas al control del Banco de España y carecen de un marco legal que las regule. Esto motiva que en muchas ocasiones actúen con falta de transparencia y apliquen comisiones abusivas, resultando sus servicios confusos e incluso engañosos para los consumidores.
- Fomenta el sobreendeudamiento familiar al proporcionar una falsa impresión de desahogo económico.